martes, 2 de abril de 2013

Juan Vicente Gomez (1907 - 1922)

 
El 23 de noviembre de 1908, Castro se separa del poder y pasa Gómez a desempeñar la presidencia en su condición de primer vicepresidente. Al día siguiente se embarca Castro en el buque Guadalupe, rumbo a Europa. La ocasión del viaje de Castro al exterior fue visto como una ocasión propicia para organizar un nuevo movimiento revolucionario por parte de los jefes del liberalismo amarillo y del nacionalismo en el destierro, quienes contaban una vez más con el apoyo de las potencias extranjeras (Estados Unidos de Norteamérica, Francia y Holanda), las cuales habían roto relaciones diplomáticas con Venezuela. Bajo estas circunstancias, Gómez obtiene el poder suficiente para organizar un golpe de Estado y sustituir de manera definitiva a Castro en el ejercicio del poder. Una vez derrocado Castro, Gómez inicia su gestión concediendo la libertad a los presos políticos e invitando a quienes permanecían en el exilio a regresar al país; además restaura la libertad de prensa, pero se niega a disolver el Congreso y a convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, tal como lo reclamaba todo el país. El 5 de agosto de 1909, el Congreso Nacional aprueba una reforma constitucional que reduce el período presidencial a 4 años y se establece un período provisional hasta el 19 de abril de 1910, fecha en que debía entrar en vigencia la reforma. En definitiva, Gómez es elegido el 11 de agosto presidente provisional de la República y el 25 de abril de 1910, es elevado por el Congreso al rango de general en jefe de los ejércitos venezolanos




El 27 de abril, las cámaras legislativas lo eligen presidente constitucional de Venezuela para el período 1910-1914, pero en 1913 Gómez decide continuar en el ejercicio del poder, creando con esa determinación, la primera crisis en el seno de su gobierno. En la etapa 1928-1935, Gómez decretó la creación del Banco Obrero del Banco Agrícola y Pecuario, y promulgó la primera Ley del Trabajo. En plena crisis financiera mundial ocasionada por el descalabro de la Bolsa de Nueva York, en 1930 canceló la deuda externa de Venezuela que se arrastraba desde el siglo XIX. El 7 de julio de 1931 prestó por última ves su juramento como presidente de la República, en lo que será su lustro final en el poder. En términos generales, durante los 27 años que gobernó a Venezuela, no varió en sus costumbres y mantuvo las mismas de su época de hacendado y de guerrero, caracterizadas por la sencillez en sus hábitos, su desconfianza en las camarillas, la relación directa con gente de todas las condiciones sociales y su capacidad para utilizar en su gobierno a las personalidades de mayor prestigio intelectual con que contaba el país



No hay comentarios.:

Publicar un comentario